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LA ÚLTIMA EJECUCIÓN CON GUILLOTINA EN FRANCIA.

El 10 de septiembre de 1977, en la prisión de Baumettes en Marsella era ejecutado Hamida Djandoubi, esta fue la última vez que se utilizó la guillotina en Francia y la ultima pena capital ejecutada en Europa.

La primera ejecución por decapitación con cuchilla de riel registrada es la del Irlandés Murcod Ballagh en 1307, el sistema fue adoptado por Francia en 1789 por Joseph-Ignace Guillotin, que rediseñó el mecanismo.

Lo cierto es que la guillotina surgió en el seno de la Asamblea Nacional, la misma que declaró la abolición de los derechos feudales (4 de agosto de 1789) y aprobó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano (26 de agosto). Pero no nació como un instrumento de justicia revolucionaria sino de garantía de igualdad ante la ley. Durante los trabajos constituyentes, el doctor Joseph-Ignace Guillotin, diputado del tercer estado por París, propuso que los principios del nuevo régimen alcanzaran también a los condenados, incluidos los reos de muerte. Hasta entonces, la desigualdad social llegaba hasta el cadalso. La decapitación por hacha o espada estaba reservada a los nobles, mientras que a los plebeyos les correspondía la horca, o, en función de la gravedad del delito, suplicios como la hoguera o la rueda.

El sistema fue implementado para reemplazar sistemas de ejecución más crueles, ya que al ser públicas, se pasaba del morbo al espanto, y no infringir al condenado un sufrimiento por encima de la pena. Desde su implementación en Francia se decapitaron a 4600 personas, en 1939 fue la última ejecución pública, a ella asistieron mas de veinte mil personas.

El ajusticiado, Hamida Djandoubi, era un tunecino de 27 años condenado por torturar y asesinar a su ex novia, Élisabeth Bousquet. Su verdugo, Marcel Chevalier, impresor de profesión, había participado como ayudante en más de cuarenta fusilamientos entre 1958 y 1976, pero sólo había accionado la guillotina en una ocasión anterior, el 23 de junio de ese mismo año, en la ejecución en la prisión de Douai de Jérôme Carrein, asesino de la niña de ocho años Cathy Petit.

No fue hasta 1981, con François Mitterrand como Presidente de la República, cuando se abolió la pena de muerte en Francia. Pese a que la mayoría de la población se mostraba a favor de la pena capital, Mitterrand ya había prometido antes de ser elegido que acabaría con ese castigo, y finalmente fue elegido.