A raíz de ciertas conversaciones últimamente con unos colegas, creo que se me antoja hablar hoy del #EasyMode o #ModoFácil en los videojuegos, del cual soy bastante defensor, así que allévoy con otro "¿Ikkien lo iba a decir? Pos yo" :gaming_kirby1:

Primero de todo, creo que la principal razón para defender el modo fácil en cualquier videojuego es la accesibilidad en los videojuegos, y fuera del ego souliano, no, no me refiero a accesibilidad para que sea más fácil para aquellos que "no tengan manos" (como frase ridícula en relación a ser malo), sino para aquellas personas que lo necesiten por cualquier tipo de problema físico o psicológico.

El segundo es porque no todo el mundo está dispuesto a dedicarle a un hobby el mismo esfuerzo y tiempo. A veces alguien se pone un juego en modo fácil no porque en normal o difícil le sea complejo, sino porque no quiere pasarse más horas de la cuenta con cierto tipo de títulos.

El tercero, y uno de los más importantes para mí, es que no todos los juegos tienen un sistema de combate y progresión adaptado a su dificultad. En ocasiones un título expone un sistema de combate nefasto e injusto, que provoca unos niveles de frustración mayúsculos cuando lo que más llama la atención no es precisamente su sistema de combate, sino su historia (por poner un ejemplo). Por ende, si lo que quiero es centrarme en la historia y el sistema de combate no está bien definido, y lo único que provoca son una serie de repeticiones sin sentido o dificultad artificial, me parece coherente bajarle la dificultad para poder disfrutar de lo que realmente me llama la atención del juego.

El quinto punto, parejo al anterior, sería que no todos los juegos tienen un sistema de combate con una narrativa asociada. ¿A qué me refiero? Si estamos hablando de cómo unas naciones entran en guerra y manejamos a ejércitos o batallones, tiene sentido que sea un SRPG como Fire Emblem. Pero si con esa misma premisa, sumado a una historia y lore super profundos, me estampas en la cara un ARPG a lo Kingdom Hearts, quizá choquen las narrativas jugables e historia, por lo que me decante por bajarle la dificultad y, como dije en el anterior punto, centrarme en la historia.

Por último, y no menos importante, es el #tiempo. No todos tenemos el mismo tiempo para dedicarle a los videojuegos. Algunos tenemos vida más allá de este hobby, y no me refiero solo a estudios o trabajo, sino a una vida personal fuera de la virtualización de Internet o los videojuegos; por ende, no es solo que no podamos dedicarle mucho tiempo, sino que no queremos. A mí me suele apetecer más pasar tiempo con mi pareja a pasarme cinco horas jugando, por lo cual, cuando me pongo a jugar, si tengo una hora (y teniendo en cuenta todos los puntos anteriores) quizá no me quiera pasar 10 horas con el mismo boss o nivel, lo intento un par de veces, o tres, y si no lo consigo pues modo fácil y a seguir con mi vida, que no es tan larga como creemos y frustrarme con un videojuego es una soberana estupidez.

Espero de todo corazón que se haya entendido en todo momento que esta es MI OPINIÓN, y no creo que sea la verdad absoluta ni muchísimo menos.

Para los que no lo sepáis, los juegos que son un reto jugable me gustan, Elden Ring me ha ENCANTADO y Celeste es uno de mis juegos favoritos (por poner dos ejemplos, Sekiro también me mola), ninguno tiene modo fácil (o al menos cuando jugué Celeste no lo tenía, no sé ahora) y los disfruté muchísimo, con la variable frustración de por medio. A veces hay que jugar títulos así y pegarse cien horas intentando algo hasta conseguirlo, porque esforzarse también es necesario y gratificante, pero no podemos exigirle eso a todo el mundo.

Me gustaría leer vuestras opiniones, sean parecidas o todo lo contrario :a2love: